In November of 2002 an American boy met a Guatemalan girl. In January of 2003 he asked her to leave her home, her family, and her land to start an adventure together. The adventure began in November of that same year and today, eighteen years later, seven other souls have joined the journey. Sometimes it’s cheerful. Mostly it’s a lot of work! But one thing is clear to them: this life, the nitty-gritty of each and every day is just a transition. At the end of the day, each “today” is just a step closer to our final destination. This life is a long walk towards our eternal, heavenly home. 

En un 2 de noviembre del 2002 un joven estadounidense conoció a una joven guatemalteca y en enero del 2003 le pidió que dejara su casa, su familia y su tierra para empezar una aventura juntos. La aventura empezó en noviembre de ese mismo año y hoy, dieciocho años más tarde, siete otras almas se han unido al viaje. A veces es muy alegre. ¡Más que nada es mucho trabajo! Pero hay algo que tienen muy claro: esta vida, el ir y venir cotidiano de esta aventura es solamente una transición. Al final del día, cada "hoy" es un paso más que nos acerca a nuestro destino final. Esta vida es una larga caminata que nos lleva al hogar celestial.